Conciertos «Ultratumba» + «Crucifuck»

El fin de semana pasado la Nave Bunker nos ofrecía caña el viernes y el sábado, yo solo pude ir el sábado para ver a los locales «Ultratumba» y «Crucifuck». Para mí eran dos bolos muy esperados ya que hacia mucho tiempo que no veía a estos grupos en directo, además del cariño que tengo por «Ultratumba» ya que gracias a ellos, creo que ya he contado esta historia, conocí la música más extrema cuando todavía estaba descubriendo el metal y el rock, en el primer «Minarock» de Barruecopardo. Puede que sea culpa suya que ahora me decante por grupos de esta índole.

Ángel y Nacho de «Ultratumba»

La noche empezó con el deathmetal de «Ultratumba» que presentaban su nuevo disco, pero no se olvidaron de los temas antiguos. El quinteto salió con ganas y al respetable, con bastante asistencia todo hay que decirlo, le gustó lo que traían los de Alba de Tormes. La verdad es que tocaron auténticos temazos, por desgracia mi cabeza no está muy centrada en estos días y se me va mucha información, pero creo que los más me gustaron eran del último redondo. Los cinco que estaban sobre el escenario mostraron sin tapujos lo que sabían hacer, con momentos muy buenos de las guitarras de Juli con solos poderosos y de muy buena digitación. Nacho al bajo metía zapatilla con frases gordas y melodías que acompañaban el trabajo de Ángel a la guitarra melódica y todo ellos con la brutalidad de Mario a la batería, que golpeaba sin miramientos y a una velocidad endiablada. Pero no había nada más diabólico que la voz de Dani, con guturales tremendos lanzando los mensajes de muerte que nos golpeaban las orejas. Cerrando con una versión/tributo al extinto grupo charro «Usagre». 

FOTOS ULTRATUMBA

Juli de «Crucifuck»

Tras la brutalidad de este grupo subieron sus compañeros «Crucifuck» y digo compañeros ya que este power trio está compuesto por Juli y Dani del grupo anterior y Fer al bajo, los anteriores son Guitarra y voz y batería. Aquí cambio un poco de tercio la noche, pasando a un thrash metal a toda hostia. Con un sonido brutal, especialmente la guitarra de Juli, que pareció transformarse, ya que aquí los punteos iban al doble de velocidad, seguían con su digitación técnica, pero mucho más enfadado. Las cuatro cuerdas de Fer rellenaban el resto del espacio melódico, con cambios de dedos a púa para los momentos más brutos de las paganas canciones que escupían directamente a la cara de Dios. Dani a la batería la gozaba y se podía ver con cada una de las caras que ponía. Aquí el disfrute fue máximo, en especial para los amantes del ataque directo a las religiones, puede que centradas en la cristiana pero no tienen pelos en la lengua a la hora de dar cera a todas las demás. Juli lanzaba proclamas cojonudas, no olvido esta; «¡Vive la aventura, mata un cura!».

FOTOS CRUCIFUCK

Una noche divertida, en la que se pudo ver a dos grupos locales haciendo lo suyo, en muy buena compañía y para mí un buen cierre de año.