Editorial: Ediciones QVE
Año: 2012
Género: Novela policiaca
Autor: David J. Skinner
Ilustraciones: No
Páginas: 105
Precio: 2,99€
Conseguido: Regalo del autor en la Muestra de cine Exhumed de Salamanca de este año (2017)
Web compra del libro
Ahora mismo el libro solo se encuentra en digital y en unas circunstancias especiales, es muy raro conseguirlo en papel.
PRESENTACIÓN:
Estamos ante una novela corta de género policiaco. De muy fácil y rápida lectura, pocas paginas que nos mantendrán pegados al papel hasta que se esclarezca el caso. Personajes fuertes nos guiaran hasta un final enrevesado en esta historia donde nada es lo que parece y en la que no te puedes fiar de nadie.
OPINIÓN:
Para empezar decir que es un libro que me ha gustado bastante, con una historia bien construida, rápido y adictivo. Sin ningún tipo de relleno o elemento que distorsione lo que se nos quiere contar. Con tan solo tres personajes principales, mas varios secundarios importantes en la trama, se nos contará este caso de giros, asesinatos atroces en el que debemos prestar atención a los pequeños detalles para poder ir aclarando quien es el asesino.
Con un estilo simple, en el mejor de los sentidos de la palabra, David nos narra una historia que escapa del aburrimiento y de las descripciones innecesarias, así como de la paja y el relleno, durante una semana seguiremos la investigación de estos asesinatos rituales, guiados de la mano del inspector Andrés Núñez. Este hombre tiene varios de los estereotipos del género, su buen gusto por el alpiste en exceso (alcoholismo), se enfrenta a las normas impuestas del cuerpo de policía para buscar la verdad, es un ejemplo de decadencia. Junto a él tendremos a su jefe y al reportero que siempre consigue las mejores fotos de los asesinatos y sigue el caso desde el principio. Estos tres serán los encargados de dividir cada capitulo o día en las distintas horas o acciones que ocurren durante esas 24 horas.
La novela bebe de los clásicos jugando con el lector en todo momento, incluso se permito un momento muy «Hitchcock» con la muerte del presunto asesino a mitad del libro y aun así se siguen sucediendo muertes y la historia continua dejando descolocado al lector durante un capitulo.
Tiene momentos tremendos a los que PERSONALMENTE les hubiera dado más fuerza, como es el tema de los asesinatos, son bastantes turbios pero siempre los leemos post-mortem, hubiera estado bien una escena pesada de muerte y recrear como el asesino pone la pieza de ajedrez en la garganta de la victima, con un poquito de sangre salpicándonos. Otra cosa que me gusta bastante y aquí no está, es el tema de la decadencia urbana, esas calles más oscuras, un poco de destrozo «borracheril», alguna breve persecución por antros al asesino... hay un poco de tonteo con el tema drogas y los barrios bajos, pero muy de soslayo y superficial, pero ya digo que es lo me gusta A MI PERSONALMENTE y que no estén en ele libro no me han impedido disfrutar de cada pagina y de ir jugando a los detectives, atando cabos por mi cuenta e imaginando quien puede ser el asesino, y dejarme engañar por la maestría de David.
Con un estilo simple, en el mejor de los sentidos de la palabra, David nos narra una historia que escapa del aburrimiento y de las descripciones innecesarias, así como de la paja y el relleno, durante una semana seguiremos la investigación de estos asesinatos rituales, guiados de la mano del inspector Andrés Núñez. Este hombre tiene varios de los estereotipos del género, su buen gusto por el alpiste en exceso (alcoholismo), se enfrenta a las normas impuestas del cuerpo de policía para buscar la verdad, es un ejemplo de decadencia. Junto a él tendremos a su jefe y al reportero que siempre consigue las mejores fotos de los asesinatos y sigue el caso desde el principio. Estos tres serán los encargados de dividir cada capitulo o día en las distintas horas o acciones que ocurren durante esas 24 horas.
La novela bebe de los clásicos jugando con el lector en todo momento, incluso se permito un momento muy «Hitchcock» con la muerte del presunto asesino a mitad del libro y aun así se siguen sucediendo muertes y la historia continua dejando descolocado al lector durante un capitulo.
Tiene momentos tremendos a los que PERSONALMENTE les hubiera dado más fuerza, como es el tema de los asesinatos, son bastantes turbios pero siempre los leemos post-mortem, hubiera estado bien una escena pesada de muerte y recrear como el asesino pone la pieza de ajedrez en la garganta de la victima, con un poquito de sangre salpicándonos. Otra cosa que me gusta bastante y aquí no está, es el tema de la decadencia urbana, esas calles más oscuras, un poco de destrozo «borracheril», alguna breve persecución por antros al asesino... hay un poco de tonteo con el tema drogas y los barrios bajos, pero muy de soslayo y superficial, pero ya digo que es lo me gusta A MI PERSONALMENTE y que no estén en ele libro no me han impedido disfrutar de cada pagina y de ir jugando a los detectives, atando cabos por mi cuenta e imaginando quien puede ser el asesino, y dejarme engañar por la maestría de David.
CONCLUSIÓN:
Un libro para los amantes del policiaco y que no tengan tiempo para lecturas muy largas o complejas. Especialmente lo recomiendo para todos aquellos que tengan el género olvidado y quieran volver o como un primer acercamiento a las historias de polis. No me cansaré de decir que es una lectura muy fácil, ágil y divertida que te absorbe por completo hasta terminar el libro, cerrarlo y decir en voz alta: «¡Qué cabrón, cómo me ha engañado!».
ENTREVISTA
1- ¿Quién es David J. Skinner y a qué dedica el tiempo?
Si me refiero a mí mismo como “artista polifacético” puede quedar muy arrogante y presuntuoso, pero en mi descargo diré que una cosa es lo que me gusta hacer y otra distinta que se me den mejor o peor unas artes u otras. Sin embargo, el quién camina de la mano con la segunda pregunta: me gusta leer y escribir. El cine, la televisión, la fotografía, la música, las charlas con los amigos y, en definitiva, todo lo que permite que, por unos momentos, pueda alejarme de la rutina o del aburrimiento.
Si me refiero a mí mismo como “artista polifacético” puede quedar muy arrogante y presuntuoso, pero en mi descargo diré que una cosa es lo que me gusta hacer y otra distinta que se me den mejor o peor unas artes u otras. Sin embargo, el quién camina de la mano con la segunda pregunta: me gusta leer y escribir. El cine, la televisión, la fotografía, la música, las charlas con los amigos y, en definitiva, todo lo que permite que, por unos momentos, pueda alejarme de la rutina o del aburrimiento.
2- Se nota que este libro bebe de las influencias clásicas del género, ¿pero quiénes son tus referentes a la hora de escribir y leer?
A lo largo de los años he leído a muchos autores, y me gustaría pensar que el talento de los escritores Douglas Preston y Lincoln Child (a quienes he leído tanto por separado como cuando escriben a cuatro manos) es una parte importante de mi estilo narrativo. Pero es innegable que de todos los libros que han pasado por mis manos habré capturado un poco, aunque sean unas migajas, de estilos tan distintos como Umberto Eco, Stephen King o Brian Lumley. Admito que, cuando escribí Los crímenes del ajedrez apenas había leído a clásicos como Hummet o, me da vergüenza decirlo, Christie.
A lo largo de los años he leído a muchos autores, y me gustaría pensar que el talento de los escritores Douglas Preston y Lincoln Child (a quienes he leído tanto por separado como cuando escriben a cuatro manos) es una parte importante de mi estilo narrativo. Pero es innegable que de todos los libros que han pasado por mis manos habré capturado un poco, aunque sean unas migajas, de estilos tan distintos como Umberto Eco, Stephen King o Brian Lumley. Admito que, cuando escribí Los crímenes del ajedrez apenas había leído a clásicos como Hummet o, me da vergüenza decirlo, Christie.
3- Has tenido asesoramiento respecto a temas psicológicos y policiales, ¿cómo han influido a la hora de construir la historia y cuanto difiere la realidad de la ficción?
Sí, me gusta que las novelas que se desarrollan en el “mundo real” sean lo más similares posibles a la realidad y para ello conté con asesoramiento en ambos temas, si bien admito que algunos consejos los obvié para favorecer que la trama avanzara de la forma que yo quería. Aun así, con algunos momentos rozando los límites, creo que es una historia que podría llegar a suceder de esa manera en cualquier ciudad española.
Sí, me gusta que las novelas que se desarrollan en el “mundo real” sean lo más similares posibles a la realidad y para ello conté con asesoramiento en ambos temas, si bien admito que algunos consejos los obvié para favorecer que la trama avanzara de la forma que yo quería. Aun así, con algunos momentos rozando los límites, creo que es una historia que podría llegar a suceder de esa manera en cualquier ciudad española.
4- Que te depara el futuro y cuáles son tus objetivos a corto plazo.
Ahora mismo ando inmerso (o empezando a sumergirme) en el mundo cinematográfico. Tengo dos novelas inéditas que, por el momento, tardarán en ver la luz, aunque no descarto escribir un guión basado en una de ellas. De momento, sin embargo, mi acercamiento al séptimo arte es tan solo como guionista, director o productor de cortometrajes. Gracias a la colaboración de varios técnicos y artistas, mi segundo corto como director y guionista, “Destino”, está a punto de ver la luz, y la verdad es que tengo bastantes esperanzas puestas en él.
Ahora mismo ando inmerso (o empezando a sumergirme) en el mundo cinematográfico. Tengo dos novelas inéditas que, por el momento, tardarán en ver la luz, aunque no descarto escribir un guión basado en una de ellas. De momento, sin embargo, mi acercamiento al séptimo arte es tan solo como guionista, director o productor de cortometrajes. Gracias a la colaboración de varios técnicos y artistas, mi segundo corto como director y guionista, “Destino”, está a punto de ver la luz, y la verdad es que tengo bastantes esperanzas puestas en él.
BIOGRAFÍA
Nacido en Madrid el 9 de julio de 1974, de padre norteamericano y madre española, David J. Skinner decidió comenzar a escribir novela a mediados de 2011, decantándose por el thriller y la novela policial. Desde entonces, lleva varias novelas finalizadas, aparte de haber sido ganador o finalista en diversos concursos literarios, destacando algunos de sus relatos cortos emitidos por diversas emisoras de radio, el relato finalista del Segundo Certamen de Relato TerBi, El hombre eterno, la novela finalista del II Premio Wilkie Collins de novela negra y ganadora del II Premio de Narrativa Libros Mablaz, Una herencia problemática, y la novela finalista del III Premio de Novela Breve Oscar Wilde, August. Pecado mortal.
Por ahora cuenta con las siguientes novelas editadas: Los crímenes del ajedrez (Ediciones QVE, 2012 / Ediciones Tagus, 2016), que salió a la venta en septiembre de 2012 y de nuevo en 2016 gracias a Ediciones Tagus, del Grupo Planeta, La amenaza (Libros Mablaz, 2013) , un thriller futurista, Masacre en Nueva York (CreateSpace, 2014), una nouvelle negra protagonizada por el detective Cutfield, y August. Pecado mortal (M.A.R. Editor, 2014). En enero de 2015 se publicó su quinta novela, Una herencia problemática (Libros Mablaz, 2015). Su ultimo trabajo, en colaboración con Rafael Estrada y Óscar F. Camporro, tiene el sugerente título de Cabrones, y fue autopublicado en 2016.
No hay comentarios:
Publicar un comentario