Con tres bandas preparadas en un principio solo pudimos disfrutar de dos, ya que los locales «Crucifuck» se cayeron en el último momento, una pena la verdad. Pero aún así se pudo disfrutar mucho de las bandas que quedaban que salieron a tope para entretener a los que allí estábamos. Dos propuestas de metal que nos hicieron mover el cabezón sin parar durante algo más de dos horas.
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| Ira Ciega |
Los primeros en salir fueron «Ira Ciega», grupo de Alicante en formación de tres que tuvieron que caldear el ambiente y dejarlo listo para el resto de la noche. Con un sonido de metal clásico con un buen trabajo de guitarras melódicas con punteos rápidos y momentos muy destacados. Un bajo de continuidad y creador de la base necesaria para que ninguna canción quede coja a la hora de los momentos individuales de la seis cuerdas, alguna frase muy curiosa, pero dentro del estilo. Atrás y dando una caña de cojones, la batería quien fue, para mí, uno de los mejores ya que además de aporrear y golpear, cantaba y llevaba la dirección de todo momento. Con una estilo muy bueno, añadiendo alguna floritura y cambios correctos, destacó mucho en esta noche. Algo que nos demostró lo que le importa, a la banda, lo que hacen y el cariño que le ponen a su trabajo fue en el momento en que dedicaron una canción, no recuerdo el título por desgracia, a una persona que ya no está aquí y ver como eso les afecto, haciendo que todo el sonido cambiase, que sonase más personal e intimo, con más fuerza y rabia le dio enteros a todo el concierto que desde ahí comenzó a subir. Tocaron varios temas propios y alguna cover, pero cambiada a su estilo y fue curioso oír a Bon Jovi con voces roncas y rotas.
Fue un buen inicio de noche y tocaron hasta dejarse la vida en el escenario, el bajista casi literalmente.
FOTOS IRA CIEGA
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| Debauchery |
Al terminar estos y casi sin esperas, salieron los alemanes «Debauchery». Otro power trio que salió a comerse el escenario y a hacer que todos los allí presentes se movieran y se lo pasaran genial. Demostrando tener muchas tablas y conciertos a sus espaldas animaron sin parar la veintena de humanos que estábamos allí. Con un metal muy bueno y con elementos muy de hard rock, pero aderezados con voces graves y guturales, nos lanzaron sus proclamas de sangre, muerte y violencia sin ningún tipo de reparo. En un primer momento las mascaras monstruosas no nos dejaban ver a los músicos, pero su puesta en escena era tremenda, desde los micros adornados, a su ropa y caras llenas de sangre, muy cercanos a los guerreros del «Kaos» del juego warhammer que tanto les gusta y les influye, puede verse en su arte y merch mucho tiránido y demonio de esa estética.
Pero este grupo es más que una imagen y su música hablaba por ellos, con una guitarra que lanzaba riffs veloces a diestro y siniestro, con sus punteos agudos y de digitación rápida. Apoyada por un bajo con un sonido fuerte, más grave de lo normal que ayudaba a crear ese ambiente opresor que quieren para su particular imagen sangrienta y brutal, que se encargaba de formar al 100% la batería con ritmos más tribales, como si llamasen a hordas a combatir, golpeo atronador y machacón sin descanso. Con un juego de voces nos remataban, casi siempre grave pero en algunos momentos los agudos hacían aparición y encajaban bien, dando ese toque de desconexión para volver a destrozar nuestros oídos con la potencia que les otorga la sangre y la muerte.
Y el set list acompañaba a que los de abajo no parasemos en ningún momento cerraron la noche casi a regañadientes, y regalándonos otras dos más de una forma sincera y agradecida. Creando una relación de colegueo con todos los asistentes y mostrando una sonrisa en todo momento, aunque con la cara de sangre daba que otra idea...
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